Tras tres años de recortes sociales y subida de impuestos,
recuerden, de ambos partidos en el poder, PSOE y PP, este es el panorama
económico y social.
* Discurso no oficial
Las élites económicas (empresas trasnacionales
"españolas" y del resto del mundo) presionando, comprando (vean
financiaciones ilegales de partidos) y/o instaladas en los grandes partidos
políticos, con el pretexto de la crisis económica, han impuesto un discurso
económico único: la salida de la crisis sólo es posible a través de la
austeridad. Ése es el mensaje que quieren grabar a hierro en la población, pero
es simplemente una burda mentira.
Estas élites, muy "bien" representadas por la
patronal, demandan una flexibilización de las relaciones laborales, que no es
más que un empeoramiento de las condiciones laborales, un debilitamiento del
poder de negociación y una bajada de los salarios de los trabajadores.
Los gastos no se han reducido, sólo se han desplazado de
unas cuentas a otras. La reducción en los presupuestos ha venido en gran parte
de las Comunidades Autónomas, las mantenedoras del Estado de Bienestar, pues
son las que gestionan la
Sanidad , la
Educación o el proyecto en ciernes de la Dependencia. Para
otras partidas las reducciones en los PGE han sido irrisorias si admitimos comparaciones.
El equivalente a estos recortes sociales está directamente
destinado a pagar, lo que un día dijeron que no pasaría estos políticos
mentirosos (no tienen otro nombre), los intereses de deuda para pagar un rescate
a los bancos (gestionados en gran parte por los partidos políticos dominantes
en la época de las Cajas de ahorro), que se encuentran con unos desequilibrios
enormes en sus balances debido a su mala gestión de riesgos y haber casi
monopolizado su negocio en el sector inmobiliario.
Por lo tanto, estamos salvando a unos bancos a costa de
nuestra salud y educación. No es casual que sean estos sectores los elegidos
para compensar las cuentas. Hay un objetivo claro por desmontar todo lo
público, y éste es su penúltimo escalón para lograrlo. El primer envite fue el
desmantelamiento de la industria, por parte del Estado, en los años 80 bajo los
gobiernos del PSOE de Felipe González. La segunda estocada vino con José María
Aznar y la privatización de "las joyas de la Corona " (Telefónica,
Endesa, Tabacalera, Repsol y Argentaria). Y el tercer pullazo va dirigido a los
pocos sectores "económicos" controlados por las autoridades públicas
(Sanidad, Educación, Agua). O como te explicas que quieran privatizar una empresa
pública como los canales de Isabel II que tiene unos beneficios anuales de 80
millones de euros.